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28.11.13

5 razones para contratar diseño

Por Mario Balcazar.

Es muy común que los negocios pequeños —y también algunos medianos y grandes—, como restaurantes, tiendas o empresas de servicios sean bombardeados por diseñadores que encuentran áreas de oportunidad para mejorar en cuanto a la comunicación gráfica que proyectan a sus clientes.
En muchas ocasiones, estos negocios comienzan con poco presupuesto y van creciendo sin la necesidad de contratar los servicios de un diseñador. Por lo general es difícil convencerlos, casi siempre llegamos con el dueño del negocio y es él quien termina por enseñarnos la forma en que ha podido subsistir.

Cuando nos enfrentamos a este tipo de situaciones es importante tener en mente estos 5 argumentos que nos pueden ayudar a resaltar la necesidad del diseño en cualquier negocio que ofrezca una cara al público. Muchas veces creen que no lo necesitan, porque no lo han visto como una necesidad, pero aquel que se aprecie de cuidar su negocio y estar al pendiente de cualquier elemento que externo que lo ponga en riesgo —como la competencia o crisis económicas, entre otros— debe saber lo que el diseño puede hacer por su negocio:


1. El diseño es a un negocio lo que la ropa a una persona

Nosotros nacemos con nuestra propia personalidad y la proyectamos a través de nuestra voz, mirada, gesticulaciones y movimientos. El diseño es como la ropa con la que nos vestimos; no constituye la personalidad por sí misma, pero resulta el complemento ideal que nos ayuda a proyectar nuestra personalidad acertadamente. Puede ser tan llamativa o discreta como su usuario, pero a final de cuentas dice algo y es irrenunciable. Incluso el no tener un diseño formal es parte de esa personalidad. Un abogado siempre querrá lucir como abogado y un diseñador como diseñador, precisamente esa coherencia se da a través de elementos gráficos que refuerzan el mensaje hacia un consumidor o cliente.

2. El diseño te ayuda a que te reconozcan

Si nos encontramos un carrito en la calle color naranja, seguramente lo asociamos con Comercial Mexicana, un refresco con una etiqueta roja nos dirá Coca-Cola, un vaso blanco con un círculo verde Starbucks y un óvalo azul en un auto es Ford. El diseño resulta la herramienta con la cual un cliente podrá reconocer un negocio, son estos elementos gráficos como el color, la forma, el tipo de letra o el acomodo de todos ellos los que actúan como recordatorios hacia cosas con las que los relacionamos familiarmente. Si el óvalo azul estuviera en un empaque de comida quizá lo asociaríamos con otra marca diferente a Ford.

La finalidad de un diseño es que los demás te reconozcan fácilmente, desde un envase de yogurt en el súper, hasta tu bufete de abogados entre otros mil.






3. El diseño te ayuda a dar el mensaje correcto

¿Se imaginan el nombre de un bufete de abogados con Comic Sans? ¿O un salón de fiestas infantiles con Trajan? El manejo de los elementos gráficos, que va más allá de la intuición o el gusto personal es lo que hace al diseñador apto para manejar una imagen y proyectarla hacia el público con una garantía de efectividad. Más allá de deducciones bien intencionadas o suposiciones, un estudio concienzudo de la marca la hará más efectiva.





4. El diseño es para todo tipo de empresas

Muchos blogs hablan de los altos costos que pagan empresas como American Airlines o Televisa para posicionar sus logos. Este argumento termina por ser nocivo para los pequeños clientes, que creen que el diseño de un logo se tasa en más de medio millón de pesos. El diseño es flexible y adaptable de forma coherente con el negocio. Se puede cobrar 500 pesos por un logo para una reunión de amigos de generación, pasando por 5 mil pesos para un negocio muy pequeño o llegar a los 100 mil para una empresa grande, que requerirá más allá de un ciento de tarjetas de presentación y papel membretado. Resulta de suma importancia recordarle a cliente que lo que está pagando es por un servicio, esencialmente intelectual, como el de un abogado o un médico (el doctor no te cobra 1,000 pesos por escribir una receta, sino por el proceso que lo lleva a poder decirte qué necesitas y dártelo).

5. El diseño no es un gasto, es una inversión

Al ser una inversión se convierte en una herramienta indirecta que permite a los clientes lograr el éxito en sus diferentes propósitos: que prefieran ir a tu restaurante en lugar del de junto, que compren tu marca porque ofrece más calidad que el de la competencia, que proyecte confianza a quien compra el producto y podemos seguirnos. Estos beneficios pueden verse en los libros de contabilidad en las empresas en los estudios de mercado, en el incremento de volumen de ventas y hasta en la productividad de una empresa al manejar formatos y sistemas más sencillos y fáciles de entender.



13.11.13

10 consejos que todo Diseñador debe saber

1. Busca buenos clientes. Aquellos que pagan.
Buenos proyectos vendrán de buenos clientes. Buenos clientes son aquellos que aprecian lo que haces y si, apreciar quiere decir pagar lo que uno se merece.
Puede ser que el buen cliente seas tu mismo y que tu futuro esté en crear tus propias obras (publicar tus propios libros o crear tus propios productos para vender al público).
Por otro lado, puede ser que te guste trabajar para otros y que dependas de buenos clientes para hacer buenos proyectos. Existe la teoría que dice que es posible educar a un cliente. Es posible, pero ese no es tu trabajo. Eso es trabajo del mercado. El mercado le dirá a tus clientes si aciertan o se equivocan. Si se equivocan, aprenderán la lección y vendrán a ti con la lección aprendida.
Lo que si es tu trabajo es hablar de forma concisa a los clientes y mostrarles tu punto de vista de forma clara. Si tienes un punto de vista claro y lo comunicas, atraerás a clientes afines a tus ideas.

2. Ideas, Ideas, Ideas. Cobra por tus ideas, por el valor añadido, no por la ejecución.

El valor añadido es lo único que te puede salvar. También puedes vender ejecución, pero ese sector es más complicado y la India o China están a la vuelta de la esquina. Vende el valor añadido de las ideas.
El buen diseño no es color, no es forma, no es composición. El buen diseño son buenas ideas. Ideas que ayudan, ideas que ayudan a entender, ideas que entendidas ayudan a crecer, desarrollar, decidir.

3. El buen diseño empieza en el buen contenido. Deberás escribir.
Para diseñar bien necesitas buen contenido. Esto lo sabes tu, no tu cliente. Tendrás que reescribir o escribir de cero el contenido para que tu proyecto quede bien.
Redactar titulares que se ajusten a tu diseño, destacados, cifras, crear gráficas, etc… deberás ajustar el contenido del cliente a tu diseño para que todo quede como esperas.
Es casi imposible hacer buen diseño sin un buen fundamento. Ese fundamento suele ser contenido. Puede ser que el contenido sea “fotos”, “texto” o una “necesidad”. Si la necesidad que cubre el diseño es floja o con poco sentido, tu diseño también lo será.

4. El buen diseño es eterno.

Las tendencias no te llevarán lejos. Aspira a crear un diseño eterno. Ayuda a que tu cliente tenga soluciones duraderas. Construye un futuro sostenible basado en proyectos duraderos que te permitan ir sumando elementos a tu proyecto.
Si te subes a las tendencias, tu proyecto estará construido de piezas que tendrás que ir reemplazando cada temporada.

5. El buen diseño es para todos.

Esto no quiere decir que tengas que hacer cosas mediocres. Pero el buen diseño (puede ser duro, blando, emotivo o seco…) ha de ser capaz de llegar a todos. Lo que no tiene sentido es hacer algo que sólo se va a entender dentro de un contexto.
Uno nunca sabe hasta donde van a llegar sus piezas de diseño. Puede ser que el contexto para cuando te quieras dar cuenta, haya desaparecido.
Piensa en diseñar basándote en buenas ideas y en resolver problemas. Eso hará que las soluciones lleguen a todos.

6. Debes ser un maestro técnicamente aunque no ejecutes.

Trabajar con imprentas puede ser un infierno si no controlas el proceso. Lo mismo pasa con los diseñadores que desconocen el mundo digital.
Debes dominar todos los procesos, para preservar la integridad de tus ideas.
Los mejores diseñadores que conocí, han sido maestros técnicamente. Lo sabían todo técnicamente (aunque no tocaran las teclas).
Es muy importante saber todo sobre técnicas, herramientas, proveedores, resultados, probar diferentes métodos. Si no dominas la técnica puede ser que tus ideas no lleguen a ser ejecutadas como se debería y la culpa será tuya. Construir castillos en el aire requiere saber como se construyen. De lo contrario se pueden quedar sólo en bonitas ideas.

7. Comparte tus ideas.

No tengas miedo de decir lo que piensas. No tengas miedo de que alguien te copie.
Es más fácil acabar haciendo una mala idea que no hacer una buena por miedo a compartirla.
No tengas miedo a compartir las tuyas. Puede ser que se de el caso de que alguien te las robe. Será raro, pero si se da y lo puedes demostrar, demanda.

8. El buen diseño es aquel que se paga.

Cobra y cobra bien por tu trabajo. El diseño es un trabajo que hace visible las ideas, servicios, productos. No creas que es efímero. El diseño hoy en día es la capa que “habla” entre las empresas, organismos, individuos y la sociedad.
Haz el ejercicio de salir a la calle y quitar la capa de diseño de tu vista. ¿Qué queda?
Procura consultar salarios, tarifas y cobra lo que sea necesario. Evita trabajar gratis para tus clientes. Tus ideas, valen su precio. Antes de empezar a diseñar, acuerda un precio. Una vez aprobado, ponte a trabajar.

9. No trabajes para / con amigos si hay dinero de por medio.

Te ahorrarás muchos problemas.
Lo mejor es trabajar con los amigos de forma gratuita. Entre colegas. Pero delimita claramente el tiempo y el trabajo.
Si hay dinero de por medio, evita el trabajar con amigos. Ellos se tomarán el trabajo como un favor y no sabrán apreciarlo.

10. Copia de los buenos.

Uno aprende a tocar el piano interpretando obras de otros maestros. Haciendo estos ejercicios uno se da cuenta de la dificultad que tiene la obra, de sus secretos, de porque las cosas están hechas de una forma y no de otra.
Luego, cuando uno alcanza cierta maestría puede lanzarse a interpretar sus propias obras.



12.11.13

NoJPEG

NoJPEG es un interesante proyecto del diseñador irlandés Larry Hynes para enseñar a los clientes como mandar un logotipo..